Este próximo domingo, 20 de febrero, la Asociación del Olivar Tradicional Español asistirá a la concentración convocada por la asociación de Mujeres Agricultoras del Arroyo del Ojanco en el pantano del Guadalmena para exigir un Plan Hidrológico justo y equitativo.

Desde Asolite, queremos hacer especial mención a que en la actualidad, el olivar tradicional supone al menos el 67,29 por ciento del olivar español, del cual apenas el 30 por ciento está en régimen de regadío.


Esto nos lleva a una más que posible pérdida de control en el mercado del aceite de oliva a nivel mundial, ya que en breve España dejará de tener la posición dominante en favor de otros países que han invertido y facilitado en la ejecución de infraestructuras y políticas asociadas de interés general.


Actualmente en España está en serio riesgo de abandono una superficie aproximada del diez por ciento de olivar, y con ello se producirá un grave incremento de despoblación de las zonas rurales que viven del cultivo del Olivar Tradicional, por las características del terreno, pérdida de arraigo e interés por el cultivo, falta de incentivos, aumento en la presión fiscal y de los costes de explotación, no pudiendo además acceder a la disponibilidad de agua.


El 3er ciclo de la Planificación Hidrológica del Guadalquivir apenas establece un incremento del volumen de agua para regadío, principalmente mediante el uso de aguas regeneradas y en torno a 20,00 hm3, lo cual supone apenas un 0,24 % más sobre la capacidad total de la cuenca.


Según la capacidad de almacenamiento de la cuenca del Guadalquivir, las provincias de Jaén (28,68%), Córdoba (42,04%) y Granada (13,18%) agrupan el 83 por ciento del agua y la mayoría del olivar tradicional español, no así la superficie de regadío. Lo que supone una situación de grave injusticia social y económica que margina y discrimina a ciudadanos de unas provincias y cultivos respecto de otros.

Existiendo en la actualidad una incomprensible tendencia gubernamental en favorecer la plantaciones en modalidades difícilmente sostenibles medioambientalmente como es el cultivo en superintensivo, sin poner por el contrario remedio a la escasez de agua con la que se dota al Olivar Tradicional, que conseguiría con ello favorecer su nivel de productividad de forma natural sin tener que recurrir a estas nuevas modalidades de cultivo y su competitividad en el mercado, con ello también se favorecería el relevo generacional y el arraigo en amplias zonas rurales. Ello sin obstáculo a que sea evidente que las dotaciones de agua deben respetar un orden jerárquico, dando prioridad al consumo y abastecimiento humano. Por otro lado el incremento de la temperatura media y el aumento de la población ejercen cada vez una presión mayo sobre la disponibilidad de agua.

Por todo ello, en el mes de diciembre del pasado año, ASOLITE registró una serie de alegaciones y medidas dirigidas a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y Alegaciones y al Ministerio de Transición Ecológica:

  • Incrementar la disponibilidad de recursos mediante:
  • Aplicar una política equitativa, dando facilidad y prioridad de acceso a aquellos olivares en riesgo de abandono.
  • Mejora de las infraestructuras de Regeneración, para ejercer un mayor y mejor aprovechamiento de las aguas grises y negras. Muchas estaciones de depuración de aguas residuales son actualmente deficitarias en cuanto a su capacidad de gestión, ya sea por falta de medios, por falta de economía o por ambas. Se pide el aumento en la inversión de dichas infraestructuras.
  • Facilitar la autorización y ejecución de estaciones de regeneración de aguas de carácter privado ante la falta de gestión o desarrollo de las públicas.
  • Poner en funcionamiento el articulado respecto a la cesión de derechos que contempla la actual Ley de aguas, facilitando el uso y disponibilidad del recurso donde más convenga.
  • Aumentar y facilitar las infraestructuras de almacenamiento para las escorrentías invernales, momento en los cuales se vierte mucha agua a los océanos. Para ello y asociado a este punto, es necesario facilitar la política ambiental, actualmente rígida y contrapuesta a los intereses generales de desarrollo rural. Es necesario unificar criterios y objetivos. Mejorar en la gestión de lodos y turbidez de las aguas de escorrentía.
  • Aumentar las infraestructuras de tipo desaladoras y descargar de presión en las provincias de Huelva y Sevilla, tanto para uso de regadío como para abastecimiento no potable.
  • Aplicar la normativa Marco europea y permitir es uso compartido de aguas subterráneas y superficiales sin limitación.
  • Evidentemente iniciar los trámites hacia una planificación hidrológica nacional que favorezca y permita la ejecución de trasvases de ámbito nacional, hecho que no solamente favorecería a la política agraria, sino al conjunto de usos del agua.
  • Incremento en el control del uso del agua y de las concesiones actuales. El aumento en inversiones asociadas a la modernización del regadío debe ir acompañada de la Administración, al mismo ritmo. Así pues, se pide un aumento de la capacidad operativa del Organismo de Cuenca.

Por tanto, debido a la grave sequía que sufrimos y a las necesidades hidrológicas que llevamos arrastrando durante décadas, desde ASOLITE estamos obligados a estar presentes en la concentración del próximo domingo, en la presa del Guadalmena, de diez a doce de la mañana. Es de vital importancia para todo el olivar tradicional español tener un Plan Hidrológico que garantice justicia en el reparto de aguas para todos, prestando mayor atención sobre las zonas más desfavorecidas.

REIVINDICACIONES DE LA ASOCIACIÓN DE MUJERES AGRICULTORAS DEL ARROYO DEL OJANCO:
1.- Disponer de una reserva de agua que garantice el suministro para el consumo humano por un periodo mínimo de dos años.
2.- Puesta en marcha de medidas de prevención contra la sequía.
3.- Reparto equitativo del agua.
4.- Plan Hidrológico justo.
5.- Medidas de prevención para garantizar el riego del olivar, de ello depende la economía de nuestros pueblos.
6.- Que el excedente de agua sea embalsado en el pantano del Guadalmena.
7.- Imponer medidas de ahorro en las concesiones de regadío de toda la cuenca.
8.- Buscar métodos alternativos de acceso al agua en el Bajo Guadalquivir.
9.- Mejorar los accesos a la presa como reclamo turístico y deportivo.
10.- Preservar la biosfera en el entorno del embalse.